En busca de una buena alma.

Si bien el inframundo es perfecto para el pecado, es perfecto para encontrar almas sucias y llenas de odio, las cuales son muy exitantes y deliciosas al degustar. Pero en esos momentos ya me había cansado de comer esas almas, y provar esa sangre, esta vez quería algo mas puro, lo cual llenará de placer todos mis sentidos y mi hambre voraz quedará satisfecha.
Me aventure a entrar a esos lugares en mi mas forma humana y camine mirando calificativamente a todos, nadie parecia bueno.
- Que fastidio..

caminaba contenta con mi usagi de peluche aunque con manchas de sangre en mi bestido pues habia tenido hambre y que mejor que disfrutar la sangre de niños pequeños y abandonados en las calles y hacerles ir alparaiso para que no sufriesen mas de este mundo.

-que buena comida y pobres niños-

dijo para mi misma

En mi busqueda de un alma sumamente perfecta, el olor a vampiro interrumpió mi concentración dirigiendo la mirada hacia el dueño del aroma, miré como se trataba de una jovencita que parecia muy dulce con ese conoje, pero, en su ropaje se podía ver que no era tan inocente como parecia.
La seguí con la mirada, y por momentos me pareció persivir que aun siendo un ser tan despreciable tenía sentimientos buenos así que curioso me dispuse a caminar tras de ella esperando ver de que cosas era capaz de hacer.
-Veamos que tienes para mi..pequeña,.-

Susurre mientras la observaba atentamente.

seguia mi camino pase de largo a aquel ser no sin antes dirijirle una pequeña sonrisa para luego segir camindo no me senti intimidada pero si con algo de curiosidad al sentir que me seguia volte la vista

-se le ofrece algo-

dijere mirandole atenta

Sonreí de medio lado al ver que la jovencita se había percatado de mi presencia, pare mi andar suavemente y llevé las manos a mis bolsillos despreocupado.
-Me pareció ver algo muy interesante en ti, es todo-
Cerré mis ojos un momento y despues los abrí, mirando fijamente a la jovencita pareciendome un ser bastante interesante.